Desde
hace años, el único espacio marítimo-urbano del que dispone
el centro de la ciudad de Santander está siendo motivo de
numerosos planes especiales. Todos ellos contestados y alegados
por los ciudadanos y por asociaciones creadas al objeto
de mantener la zona denominada de San Martín de Abajo (o
Gamazo) como de uso público. Todos los proyectos instados
hasta ahora por diferentes administraciones han ido dirigidos
(según la opinión de muchos) a la especulación, a la construcción,
incluso a quitar muchos metros cuadrados a lo poco que le
queda a la Bahía santanderina (lo que algunos denominan
en Santander "quitarle" a la Bahía).
Hace
unos dos años se aprobó el Plan Especial del Puerto de Santander,
pero para la zona de Gamazo (debido al aluvión de alegaciones
ciudadanas) se creó un Plan Especial dentro del Plan Especial.
Desde entonces se está esperando la solución para esta zona
urbana. La pelota está en el tejado de la Comisión Regional
de Urbanismo dentro de la Consejería de Obras Públicas.
No
obstante, todos los planes parece que plantean siempre lo
mismo: "ganarle" casi 35.000 metros cuadrados
a la bahía, construcción de zona residencial en la ladera
de San Martín, desarrollo urbanístico salvaje, etc...
En los últimos tiempos ha aparecido otra argumentación para
"volver" a tomar el tema de "Gamazo"
por parte de la administración. Desde diversas entidades
(como el ayuntamiento de Santander) se está "animando"
a los ciudadanos para que la ciudad participe en las Olimpiadas
de Madrid, siendo subsede para las pruebas náuticas. Esto
no es más que un nuevo intento para volver a desempolvar
un Plan que interesa a unos pocos y que nos afecta a todos
los ciudadanos de Santander.
Agradecemos a la Asociación de Amigos de Gamazo los materiales
puestos a disposición para elaborar esta documentación y
llamamos a todos los vecinos de Santander a que estén atentos
porque aunque el Dique de Gamazo haya sido declarado de
interés cultural, el llamado popularmente "Plan de
Privatización" de un espacio marítimo-urbano público
sigue amenazando la historia de la ciudad.
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